El logo conserva elementos ya conocidos para BBVA como el color y el uso de mayúsculas, pero introduce una nueva tipografía y un diseño que le otorgan más versatilidad y funcionalidad en plataformas y canales digitales.
El nuevo logo trajo consigo controversia debido a la letra “A” que sobresale al final y que no está en línea con el resto de las siglas. La A elevada del logo se llama “ascender” porque representa la oportunidad.
La marca asegura, “Es una historia de crecimiento, un símbolo universal de prosperidad. Para muchos puede parecer que esta elevación es desordenada, pero nada que ver. Si hay algo que nos gusta en BBVA, es el orden”.
En la nueva identidad de marca de BBVA se ha aprovechado al máximo el talento interno. En ella trabajaron 50 diseñadores de todas las filiales del Grupo liderados por el equipo global de marketing con el apoyo de su agencia interna BBVA Creative, la agencia DDB y el asesoramiento estratégico de la consultora Landor.
El proceso de diseño del nuevo logo del BBVA llevó aproximadamente cuatro meses de exploración creativa, pruebas con usuarios y, finalmente, la creación del arte final.
Se hicieron diversas pruebas y diseños que se testaron con clientes y no clientes de diferentes países. En total se llegaron a analizar las opiniones de casi 5.000 personas para tomar decisiones basadas siempre basándose en datos y en la estrategia. “Un trabajo de mucha gente y muchos equipos, que han buscado la excelencia en todo momento”, apuntan.
La marca argumenta que en todas las culturas ir hacia arriba es ir hacia adelante, crecer y encontrar una oportunidad. De ahí que expliquen que, si la A final de BBVA estuviera en línea con el resto de letras, “se podría interpretar que simplemente se ha hecho un cambio de tipografía, pero no es así. El nuevo logo de BBVA es una muestra tangible de que la transformación del Grupo es imparable”.
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